A esta película ya la vi...

Nuevamente a Flandria se le escapan dos puntos sobre el epílogo del partido con una jugada polémica.

De película. Una de terror, claro. Cuando todos en el Carlos V festejaban lo que ya parecía una victoria segura, Mario Prieto corrió desde el círculo central hasta el área defendida por Ramírez marcando el punto penal. La sensación de injusticia que había quedado tras el partido con Morón, volvía a hacerse presente. No sólo por lo discutible del penal - la falta existió, pero dio toda la impresión de ser fuera del área -, sino también porque ya se habían cumplido los cuatro minutos de adición anunciados por el árbitro. Poco le importó a Argüello, que desde los doce pasos estableció el 1-1 final. Lo cierto es que Almagro, con un planteo cauteloso a lo largo de los 90 minutos, consiguió lo que vino a buscar: Un punto. Flandria lo buscó durante todo el partido, no encontró los caminos pese a ser un claro dominador y a tener las mejores situaciones y encontró la apertura del marcador recién a los 38 del segundo tiempo, con una gran palomita de De Porras tras una gran jugada individual de "Lucho" González que estrelló su remate en el travesaño previamente.
Si bien la bronca perdura, hay varios aspectos positivos de este Flandria que siguen permitiendo ilusionarse a todos los hinchas canarios: La defensa es otra, ya no es endeble y desordenada como durante la primer parte del campeonato; la ofensiva del equipo sigue siendo la misma, con dos goleadores letales como De Porras y Montenegro que siempre aparecen, jugadores como "Lucho" González, Cigno y Brizuela que aportan claridad y los desbordes del "Perrito" González y Vicente - ausente en este último partido por acumulación de amarillas -, que siempre aportan desequilibro por las bandas. Así, y pese a todo, Flandria ilusiona...